Monday 8 January 2007

Lo mejor es ignorarlo todo


Jo, lo que me ha pasado esta mañana!!!
Iba en el metro y frente a mi habia un hombre que no paraba de mirarme. No comprendia muy bien sus intenciones en todo caso no he tratado de averiguarlas, me he limitado a mirar los pies de la mujer que estaba sentada al lado del tipo raro. Por fin llega mi parada, me levanto con cuidado de no tocar nada, el metro me da asco, tanta gente... mientras espero a que las puertas se abran noto el aliento caliente de un ser humano en mi cuello, miro de reojo, el mismo hombre esta mirandome fijamente. Me bajo.
-Disculpe- oigo a mis espaldas. Me hago el loco, no tengo nigunas ganas de aceptar sus disculpas.
-Perdone- insiste
Me tira de la manga. Me doy la vuelta y le digo:
-Si, perdone. Pensaba que no se estaba dirigiendo a mi. Digame, que quiere?
-Queria hablar con usted
-Le estoy escuchando- contesto
-Como cree usted que hubiese funcionado la perestroika en Honduras en 1850?
Le pregunta me irrita. No siento ningunas ganas de conversar con ese señor
-Señor, ese es un tema que no me interesa en absoluto- mientras digo esto me doy cuenta de que llevo demasiado tiempo en el metro, me da mucho asco y aunque ese hombre me habla a una distancia razonable para mi no resulta suficiente.
-que tiene de malo el tema?- me pregunta
-el tema no tiene nada de malo- de hecho ya ni siquiera recuerdo cual era-lo que pasa es que tengo un poco de prisa
-Por que? Donde va?
-Voy a trabajar, aunque tengo la intencion de anunciar que estoy enfermo e irme a casa para ver una pelicula que alquile ayer.
-Esta bien- contesta el tipo raro- salgamos de aqui, Usted lo que necesita es respirar aire puro.
Acepto a desgana. Una vez fuera, el tiempo es horrible, el hombre me invita a refugiarme debajo de su paraguas. Por supuesto prefiero mojarme antes que estar tan cerca de un humano.
-Retomemos la conversacion- dice- quiere un cafe?
Mientra mi nariz gotea, le digo:
-Que conversacion?
-La perestroika en Honduras en 1850
Por primera vez reflexiono en sus palabras y me doy cuenta del absurdo que suponen, me dirijo a el.
-pero digame, que regimen habia en Honduras por entonces?
-Comunismo. No se llamaba asi, pero era lo mismo, no existia la propiedad privada, todo (excepto los bienes de tipo religioso) pertenecia al estado, el estado tenia control total sobre la sociedad, cada ciudadano era igual a su vecino. Al parecer no funciono mas de 10 meses. Lo curioso es que su ideologo, Fabian Cabeza, jamas habia oido hablar del Socialismo.
Miro al hombre fijamente. Se esta mojando como yo, su paraguas ya no le cubre. El hombre sonrie, quiere seguir hablando, para ello espera respuesta de mi parte. Salgo corriendo a toda velocidad, antes de cruzar la primera esquina miro para atras, el hombre me sigue, pero parece torpe, no me va a alcanzar. LLego a mi casa, miro hacia atras, el hombre corre con la lengua fuera a unos 300 metros. Tranquilamente saco la llave, la meto en la cerradura y entro en el portal de mi casa. Apreto el boton del ascensor, a mis espaldas oigo unos nudillos mojados golpear contra el cristal de la calle. Lo ignoro. Subo a mi apartamento. LLeno el baño de agua templada. Me meto. Oigo el telefonillo, lo ignoro.

2 comments:

Anonymous said...

Joder, desde mi punto de vista, el del materialismo filosófico no se puede presuponer en 1850 ningún tipo de perestroika a priori pues ese concepto viene dado alrededor de 1980 y no se puede extrapolar someramente y superficialmente a la Honduras de 1850, si acaso podríamos hablar de algún tipo de segunda corriente de izquierda (leer libro "el mito de la izquierda" de G. Bueno). La historia narrada amén de la discusión no llega ni a chascarrillo estético, vuelvete a leer al tipo ese de la magdalena a ver si aprendes por osmosis.

Anonymous said...

Este tipo tiene gracia, el tal Héctor, me pregunto qué tipo de persona será, eso sí, cuidado con él, cuando tu vida se convierte en teoría ya no hay salida, el mundo de las palabras te envuelveeeeeeeeeeoeeee